Querida Delfi:
A veces el guion de la vida tira giros de trama inesperados. Conocernos de casualidad en la AGS, entre fotos y gente disfrazada, fue un glitch en mi simulación habitual. Fue una ironÃa del destino: cruzar a una diabla de la noche con un aspirante a Caballero de Dios. No soy alguien que suela detenerse; mi naturaleza es avanzar, perseguir objetivos y mantener la disciplina estoica en armonÃa con mi fe.
Sin embargo, aquella noche en Recoleta fue distinta. Cuando nos sacaron de ese lugar y terminamos caminando tres horas sin rumbo fijo, bajé la guardia. En esa caminata, entre el frÃo y la charla, permità que el personaje dejara paso a la persona. Me recomendaste ver Spy x Family. Es una buena serie, tiene su encanto, pero al final del dÃa, mi realidad se parece más a Gachiakuta: caer al abismo, ensuciarse y subir a base de pura voluntad.
He llegado a un punto de inflexión. He decidido renunciar a los apegos para enfocarme al 100% en forjarme a mà mismo. Fuiste la tercera y última persona con la que crucé ese lÃmite, y me alegra que haya sido con vos, en esa caminata honesta, y no en un boliche cualquiera lleno de ruido.
Esto no implica levantar un muro infranqueable, sino trazar una frontera clara. No me cierro a la posibilidad de compartir una charla o volver a coincidir, pero ha de ser bajo los términos de una alianza estratégica, similar al pacto de los Forger. Si nuestros caminos se cruzan, que sea con la eficacia de dos agentes que cooperan para un fin común, manteniendo el respeto y la camaraderÃa, pero sin permitir que los sentimientos reales pongan en riesgo la "misión". Valoro tu presencia, siempre que sea funcional al objetivo y mantengamos la distancia profesional necesaria para no descarrilar.
Ahora vuelvo a mi cueva, a mi taller; a la electrónica, al entrenamiento; al silencio y al hierro. No es nada personal, es simplemente que el camino que elegà se camina solo.
Espero que sigas entrenando y que encuentres tu propia versión de la grandeza.
"El sufrimiento y el dolor son siempre obligatorios para una conciencia amplia y un corazón profundo." — F. Dostoyevski
Nos vemos pronto,
G.G